La evolución de la prevención en Protección Contra Incendios

La Fundación Mapfre y la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos elabora anualmente un estudio sobre víctimas de incendios en España y, analizando los últimos resultados, queda patente que la tendencia en el número de fallecidos desde 1980 hasta 2013 fue a la baja, pero, lamentablemente esta cifra ha ido aumentado hasta 2017, último año del que se han publicado estadísticas. Tengo la confianza de que será un pico temporal y que entre todos conseguiremos revertir esta tendencia alcista.

Se debe destacar un dato que, año tras año, se repite y llama mucho la atención: más de la mitad de fallecidos se encontraban en la primera o segunda planta de los edificios. Esto es “contrario” a la lógica de la evacuación, que indica que cuanto más alto es un edificio más peligros presenta en caso de incendio.

Tras un análisis más severo, se pueden extraer algunas conclusiones y posibles causas de esto:

• Los edificios en altura son pocos en el conjunto de las construcciones, se concentran en grandes ciudades y la mayoría son de construcción reciente, sin embargo, los de tres plantas o menos se concentran en zonas residenciales de viviendas unifamiliares o zonas rurales siendo estas últimas, en su mayoría, de construcción antigua y la seguridad contra incendios no fue un factor considerado en su diseño.

• La mayor presencia de rejas en las plantas bajas de muchos edificios, que impiden una salida relativamente fácil al exterior y no permiten una ayuda rápida desde la calle. Este hecho reafirma una realidad conocida por los prevencionista: la sociedad está muy concienciada frente al riesgo de robo, pero muy poco frente al riesgo de incendio.

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